martes, 24 de enero de 2012

TEOLOGÍA SISTEMÁTICA






Amados alumnos que Dios les bendiga


PRESERVACIÓN





El pacto de Jehová. es decir, que Su Plabra permanecerá para siempre, ha sido proclamado hasta el presente. Los hombres han realizado sus mejores esfurzos para destruir la influencia de las Escrituras. Muchos han testificado en contra de la Biblia y también han predicho su desaparición; pero hoy, como en ningún otro tiempo de la historia del mundo, la Biblia se distingue como una influencia positiva para el bien, y dicha influencia continúa creciendo. La preservación de la Biblia, al igual que el cuidado divino en guiar a los instrumentos humanos que la escribieron como también en la formación del canon, no ha sido incedental, ni accidental, ni fortuita. Las Escrituras representan el cumplimiento de la promesa divina. Lo que Dios ha realizado en Su fidelidad, continuará hasta que Su propósito sea realizado. En realidad los hombres pueden hacer muy poco en su intento por frustar la efectividad de la Palabra de Dios, pues está escrito de dicha Palara: "Hace mucho que he entendido sus testimonios, que para siempre los has establecido", y , "Para siempre, oh Jehová, permanece (está establecida) tu palabra en los cielos" (Sal. 119:152, 89). Y Cristo afirmó: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán" (Mt. 24:35); y el Apóstol Pedro declara que "la Palabra de Dios" es aquella "que vive y permanece para siempre" (1P. 1:23).
    No es una pequeña distinción conferida sobre la Biblia que ésta haya sido clasificada entre las pocas realidades que permanecen para siempre. El escritor de la epístola a los Hebreos predice el tiempo en que serán removidas todas aquellas cosas que pueden ser conmovidas y la continuación de aquellas cosas que no pueden ser conmovidas. El escritor se refiere específicamente al reino de Dios y contempla, naturalmente, todo lo que está incluido en dicho reino (He.12:25-29). La permanencia eterna de la Biblia es predicha; no quiere decir esto que su mensaje en todas sus partes necesita ser predicado como lo es ahora, sino que ésta es indestructible, siendo, como lo es, la Palabra de Dios eterno. No es que se haya escogido un libro de manera arbitraria de entre los inumerables volúmenes escritos por los hombres y luego darle el más alto honor. La Biblia es eterna en su propio derecho. La Biblia permanece para siempre debido a que nada de lo que Jehová ha hablado puede ser quebrantado o destruido. En verdad, es por medio de Su Palabra escrita que Dios anuncia Sus mandamientos acerca de "todas las cosas" que no pueden ser conmovidas. Las Escrituras son el instrumento legal por medio del cual Dios obliga a Sí mismo a ejecutar todos los detalles de Sus pactos eteernos y a cumplir todas las predicciones hechas por Sus profetas. El instrumento legal que garantiza toda esta vasta consumación tiene que continuar, y continuará, hasta que la última promesa, por la que permanece como garantía, haya sido cumplida. Ni una jota ni una tilde del testimonio divino puede pasar hasta que todo se haya cumplido.



Amados alumnos que Dios les bendiga, mañana comenzamos con TEOLOGIA PROPIA...

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